lunes, 11 de junio de 2012

Fernando Azcárraga tiene un problema: El apellido


El gobierno federal al parecer, está reflexionando  con lentitud y lejos de ejecutar rápidamente sus decisiones, deja en una incógnita en su proceder sobre el asunto de los ex gobernadores de Tamaulipas,  ex colaboradores y socios.

Tal vez no exista nada real y solo se esté tratando de desinformar y dañar la imagen de la campaña del PRI a la presidencia de México.

Tal vez se esté planeando una operación quirúrgica y letal que de un solo golpe deje noqueado al priismo nacional.

De hacerlo, lo tendría que hacer ya, lo más pronto posible porque entre más tarde, menos efecto tendrá. Mejor dicho para muchos ya está a destiempo.

El gobierno federal debe saber que: las decisiones rápidas son decisiones inseguras.

Tampoco  se deben presentar con trompetas las decisiones importantes, por ejemplo la detención de personajes tan representativos de los últimos tiempos como lo son los ex gobernadores.

Por otro lado para muchos es sospechoso el silencio y la tardanza del Presidente Calderón, lo que hace pensar que tal vez el cambio de poderes en México esté previamente negociado y de esta manera el PAN devuelva la copa al PRI, ese PRI que un día, en manos de el ex presidente Ernesto Zedillo cedió el poder a un PAN con botas.

Por otro lado y dentro del mismo contexto electoral, las autoridades del vecino país acusan Pablo Zárate Juárez, uno de los organizadores de eventos priistas de ser pieza clave en la operación de la compañía Premier International Holdings creada en San Antonio, Texas, por Fernando Alejandro Cano Martínez, prófugo de la justicia de Estados Unidos, acusado de lavar dinero, proveniente del crimen organizado, para Yarrington.

La presencia de Zárate se debe a su muy estrecha relación con el ex alcalde de Atizapán, Luis Felipe Puente, quien es un hombre muy cercano a Peña Nieto.

De acuerdo con personas cercanas a Zárate, discretamente ha logrado que recomendados suyos entren a la campaña de Peña Nieto en posiciones de bajo perfil

El nombre de Pablo Zárate aparece por primera vez implicado en la red de lavado de dinero de Yarrington en la solicitud de orden de arresto presentada el pasado 5 de junio ante el Distrito Sur de Texas.

Pablo Zarate fue en el sexenio de Tomás Yarrington director general del ITAVU estatal de donde a su amparo, salieron muchos “exitosos empresarios” en el ramo de bienes raíces, pero ese es tema para una próxima entrega.



EL APELLIDO

Existen muchas historias de las luchas por el poder en Tamaulipas. Ahí les va una:


En los comederos políticos de Tampico, ha corrido la especie de una conspiración contra la personalidad y lo que representa Fernando Azcárraga López, candidato a la diputación federal por el distrito VIII en el puerto jaibo.


Los principales grupos de poder en el estado, incluyendo el del Tamaulipas actual, saben y bien que saben—diría un personaje de moda—que si dejan llegar al ´tampiqueño con ganas’ a la curul, tienen bien claro que además de contar con el apellido y el poderío de una televisora además del miedo a los eventuales spots de Televisa, de llegar Peña Nieto a la silla presidencial difícilmente los grupos: “Frontera Power”(Matamoros y Reynosa),” Victoria” y “El Tamaulipas Fuerte”, podrán detenerlo.


Es por eso que se habla de una conspiración a través de un “cuervo disfrazado de paloma” que despacha en la casona de la calle Colón, quien se presume en coordinación con algunos operadores estatales y, con los más de veinte años de experiencia  con los que cuenta en la operación política en las colonias de Tampico, harán de todo para frustrar, reprimir, impedir a toda costa, el “Proyecto Azcárraga”.

En palabras sencillas: “Solo el PRI puede derrotar al PRI”…aguas Fernando ¡!!...

Muchas gracias y hasta pronto…

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