Juan Camaney. ¡Tururú!

Magdalena Peraza Guerra no es maestra, es profesora; bueno, eso dicen. Ha pasado más tiempo en la grilla que en un salón de clases.

¿Es jubilada o docente activo? Ella nunca toca ese tema. Lo cierto es que a millas de distancia se observa que la docencia o el oficio por el estar frente a un grupo, le importa un reverendo cacahuate.

La señorita presidente municipal de Tampico, solo utilizó su plaza de profesora como trampolín para sus aspiraciones de apoderarse de la ciudad y de su presupuesto como hoy en día la observamos.

Lo que si nos queda claro a los tampiqueños, sobre todo a los priístas y panistas es que, la “maestra” Magda Peraza, es una verdadera Maestra: pero del cuento, la mentira, la simulación y el engaño.

Con una carrera de casi cuatro décadas y fiel a las viejas practicas del PRI de antaño, ha dividido a las diferentes corrientes dentro del PAN tampiqueño partido del cual se apodero. Ha simulado apoyar a uno tanto como otro.

Pero al final sigue impulsando y apoyando su propio proyecto personal: el de perpetuarse en las instituciones sean estas del color que sean.

Para ello se apoya en su principal cómplice, alcahuete y tercero: Víctor Fuentes Salazar. El mismo que se avienta las misiones de operación secretas y asiduas en la ciudad de Monterrey.

Aprovechando que los pioneros del Neo-Panismo en el puerto, han emigrado por motivos de seguridad, hoy detenta el control del mismo teniendo como puente de enlace a Lucirene Alzaga Madaria, a quien recompensa muy bien en el DIF, de la misma manera que Esteban Fuentes Salazar; hermano de Víctor, el ‘tercero’ antes mencionado con el poderoso empresario Henry Fleishman

En fiestas, suntuosos, costosos y excesivos viajes; haciendo uso de los recursos del municipio para codearse y rodearse con artistas de talla internacional, bellas modelos y edecanes a costillas del presupuesto. En fin una verdadera dilapidación.

Pobre PAN, cuanto lo ha dañado la alcaldesa que se viste un día de azul y al siguiente tricolor, dependiendo su conveniencia y los negocios en puerta.

De hecho creemos que de alguna manera esa siempre fue su función. Dañar al PAN.

Con lo deterioro y división del PAN, ahora cualquier candidato que seleccione el PRI, el que sea, la llevará ‘ganóna’.

Actualmente el empresario y químico Sergio Salazar Salazar, cuenta con una carrera política aceptable y con un perfil requerido por las elites políticas en el puerto, es también, perteneciente a la llamada vela perpetua.  Podría ser un candidato cinco estrellas. De hecho lo es.

Solo que tiene un problema: existe un truhán (RAE: persona que vive del cuento, la mentira, la simulación y el engaño) representando a su partido en la presidencia.

Magda Peraza dañó de manera irreversible (cuando menos por un par de lustros) al un día conservador PAN jaibo.

Adivinanza.

¿Quién será el edil dela comuna tampiqueña que se ha caracterizado como admirador del clásico personaje “el chido”, representado por Luis de Alba, quien expresaba el ya clásico ¡Tururú!?

Una pista: se inquieta con las chicas (y no tan chicas) guapas a su alrededor.

Muchas gracias y hasta pronto…